El costo de oportunidad es el beneficio que pierdes por elegir otra opción. Por ejemplo, si decides no leer este blog, renuncias a aprender cómo este cálculo ayuda a tu Pyme. ¡Tú eliges! Aunque sé que si llegaste hasta aquí, es porque quieres aprender.
¡Nada como tener plata en la caja! ¿Cierto? Sin embargo, tengo que contarte algo que quizás no te guste mucho: tener tanto efectivo no le hace bien a tu Pyme.
Hablo en serio. Aunque tu hoja de balance se vea toda verde y rebosante, podrías estar invirtiendo ese dinero en activos o mejoras que hagan tu negocio más competitivo.
Así que lamento decirte que estás incurriendo en un costo de oportunidad.
¿Qué es el costo de oportunidad?
Es el beneficio potencial que dejas de percibir cuando eliges otra opción. Es un cálculo interno que te sirve de guía, pero no es un indicador financiero que debas incluir en el balance general o en el flujo de efectivo.
Por ejemplo, la decisión de dejar el efectivo en la caja te cuesta tiempo y todo el beneficio que significa invertirlo.
No me malentiendas, ¡un balance positivo lo quiere cualquiera! Es un indicador de sanidad que dice que tu liquidez fluye, que cuentas con capacidad de pago para renegociar deudas, reinvertir en tecnología, cumplir con tus obligaciones legales y contar con un colchón financiero para imprevistos.
Pero si no lo ocupas, ese dinero pierde valor. Las oportunidades a las que renunciaste incluyen:
- Depositarlo en una cuenta de ahorro o un depósito a plazo para que genere intereses.
- Invertir en un software de gestión financiera para automatizar tu flujo de caja, cobranza, pago de facturas a proveedores, etc.
- Financiar capacitaciones y certificaciones de tus trabajadores para aumentar el nivel de productividad de tu empresa.
¿Por qué es importante que conozcas el costo de oportunidad de tus decisiones?
Como administrador@ o dueñ@ de una Pyme, tienes que decidir constantemente. En algunos casos das en el clavo, y en otros te equivocas. Así es la vida, pensarás. Pero no, este cálculo te ayudará a tomar cada vez mejores decisiones para que sean más aciertos que errores.
Este costo finalmente se convierte en un aprendizaje. Lo usas como referencia para la próxima decisión que tomes. Por ejemplo, si nuevamente cuentas con mucho efectivo disponible, ya sabes lo que significa no utilizarlo.
Sin embargo, muchas Pymes desconocen que enfrentan costos de oportunidad, menos aún su importancia. Esto ocurre sobre todo al inicio del negocio, cuando la empresa está solo concentrada en vender, por lo que renuncia a muchas oportunidades inconscientemente, o le pasan desapercibidas porque no solucionan necesidades específicas del momento.
¿No tienes claro si estás enfrentando un costo de oportunidad? Aquí te dejo más ejemplos de que lo podrías estar pasando por alto:
- Invertir en producir un nuevo producto y el costo potencial de emplear ese dinero en otros gastos de la empresa o ahorrarlo.
- Perder ingresos potenciales por ventas, ya que solo decidiste aceptar un tipo de medio de pago.
- Pagarle atrasado a tus proveedores y perderlos frente a la opción de pagarles a tiempo y retenerlos.
- Arrendar una oficina comparada con invertir en la modalidad teletrabajo.
- Expandir tu negocio hacia una ciudad o país X versus la ciudad o país Y.
¿Cuáles son los tipos de costos de oportunidad?
Existen diferentes formas de reconocerlos:
- Directos: sabes exactamente a lo que estás renunciando cuando eliges la alternativa.
- Indirectos: no te percatas de la oportunidad perdida hasta después de que tomaste la decisión.
La Enciclopedia Económica precisa otras dos formas de clasificar este costo:
- Creciente: la decisión implica aumentar el volumen de algo (insumos, producción, productos) y las posibles pérdidas y beneficios que conlleva hacerlo.
- Constante: la decisión significa dejar como está lo que ya tienes o haces porque los costos de hacerlo así son estables.
¿Cuál es la fórmula para calcular el costo de oportunidad?
¡No es física cuántica! Es bastante sencilla. Solo restas el retorno de la decisión no tomada con el retorno de la que tomaste.
El resultado puede ser expresado en dinero o en otra unidad de valor, como tiempo o cantidad.
Es decir:
CO= Opción no elegida – Opción elegida
¿Cuál es la diferencia entre el costo de oportunidad y el costo hundido?
El costo irrecuperable o hundido es la decisión que tomas y que no puedes revertir. Es el resultado de ejecutar la decisión y ya sucedió. Siguiendo con el mismo ejemplo de dejar el dinero en efectivo en tu caja sin invertir: ocupaste tiempo, el cual no puedes recuperar.
Ahora bien, si ahora decides invertir ese efectivo extra, puedes compararlo con otras opciones y calcular así el costo de oportunidad. Una vez que tomas una decisión y la haces efectiva, pasa a ser un costo hundido.
Muchas personas confunden ambos costos cuando se arrepienten de la decisión tomada, explica el software de gestión de tareas Ansana. Pero aquí te la dejo fácil:
- El costo de oportunidad valora la posibilidad de una opción frente a otra.
- El costo hundido valora la ejecución de la opción elegida.
¡Bonus! 3 Consejos para que aproveches al máximo tu cálculo de costo de oportunidad
- Compara tu opción elegida siempre con más de una alternativa de la que renuncias.
- Mantente al día con tu flujo de caja y balance para saber cómo tu decisión afectará las finanzas inmediatas de tu empresa.
- Incluye tu cálculo como una nota al pie de tus estados financieros cosa de no perder esta información vital en la toma de decisiones.